desvelo

Párpados que proyectan con sonora sombra, acelerados fotogramas..

nos exponen en escena compartida, construida, recordada o preságica. Protágonicas palabras

que desvelan transitando por sendero líquido flotando sin brújulas a entrecielos..

los ojos abiertos con mismos párpados clausurados mirando hacia afuera mundo de entresueños, entrenuestros, que se tejen entreellos.

epistolar

Princesa de reino telúrico, es lo que nos queda por el momento: vestirnos de lenguaje, domarlo, jugar con él.
Nuestro ropaje y geografía, todo vuelto tipografía, oraciones y frases. Se nos cuela por los huecos nasales y los ojos pero es nuestro reino. Resistir allí y volver bella cualquier instancia, escarbar en las grietas como aprendimos y dejar inundar todo de amarillo, magenta y cian.
Nos encontramos de a pie, de la mano, del brazo, codo a codo, hombro a hombro. Como guerreros entintados en tierras galácticas. El reino es nuestro.

cuenco

Manos forman cuenco, como dos emisferios que lo contienen todo; toda la vida, todo el tiempo y el espacio. Decanta historia y en presión gravitatoria, una franja azulada atraviesa un universo oscuro.
La rendija que separa y une ambas manos se abre; es por ahí por donde transita todo lo que hasta ese momento se hallaba condensado, en ebullición. Como líquido se derrama y lo envuelve todo. Desborde de agua y tierra.
Viajes inmateriales de raigambre auditiva: nuestras voces halladas posibilitan el encuentro de nuestros cuerpos vueltos éter, capaces de suspenderse en el aire, suaves y livianos.
Planos visuales de los más diversos. Explosión sensorial en un espacio esférico separado por entrepisos. Allí habitamos. Allí habita quién.

bridge

puentes.
todos los posibles.
de todos los tipos, tamaños y colores.

I.II

pendular desesperadamente y abrazar la ternura como tesoro primitivo

I.I

Podían viajar sin moverse. Podían encontrarse aún cuando todos los pronósticos dijeran lo contrario.
Podían brillar en espectros naranjas y desafiar la terrible materialidad.

Capítulo I

que sea presagio